Confesiones de una sanadora

Confesiones de una sanadora

Sarabjit Kaur Khalsa es una maestra de yoga kundalini de Los Angeles, California, que lleva 40 años viviendo en España y acaba de terminar su trilogía autobiográfica «Confesiones de una Sanadora» donde relata los últimos 25 años de su trayectoria.

Recuerdo que cuando la conocí y me di cuenta que era una Americana como yo y empezamos a hablar en ingles juntas le comente lo difícil que había sido empezar a dar yoga en La España Profunda y me contesto sonriendo «Pues imagínate a finales de los años 70 con la dictadura recién terminada.» Pues no me lo podia imaginar, entonces le pedi que me lo contara. Con decir que no fue nada fácil. Sarabjit no se pudo imaginar lo diferente que seria ser una joven yoguini en España cuando estaba acostumbrada a ser alumna de Yogui Bhajan en Estados Unidos donde ya se conocía la practica. Sus relatos me conmocionaron y entendí que ella había trazado el camino para que yo pudiera nacer y venir a hacer lo mismo, ser una maestra de yoga, educadora y sanadora. De hecho no dudo que yo estuviera «allí arriba» esperando su llegada a España para decidir encarnarme como Española-Americana que tendría que volver a mi raíces. Pero esa historia es para otro blog…

Hoy quiero compartir con vosotros la pequeña entrevista que le hice a Sarabjit sobre sus libros. Como maestra de tantos instructores de yoga no necesita escribir libros, de hecho tiene muy poco tiempo para hacerlo, ya que ademas de formar a cientos de yoguis también hace tés y cosméticos naturales, es la secretaria general del European Khalsa Council, sirve en el junta de consejo de 3HO Europa y tiene una finca en la naturaleza que requiere mucho trabajo mantener ya que esta creando un centro de sanación innovador… Entonces, mi pregunta principal para ella fue «¿Porque has decidido escribir estos libros?» Y la respuesta es verdaderamente fascinante porque ha tenido que arriesgar mucho para contar su historia…

Compartir:

Te Recomendamos

No se han encontrado resultados.
es_ESSpanish